Un año más pasa por nuestras vidas, pero como se suele decir: «bienvenido sea», porque eso significa que seguimos disfrutando de este viaje.
A falta de poco días para que finalice el año quiero mostraros imágenes que, a mi manera de ver, podrían describir el paso del 2014 por la villa.
El mes de enero comenzó igual que terminó el 2013, lloviendo. Este año no nos hemos podido quejar de agua, porque ha habido para todos.
Los carnavales llegaron con las mismas ganas de ver color que la primavera, aunque el tiempo nos permitió salir por las calles, también, fueron lluviosos y fríos.
Y de unas fiestas paganas pasamos a las religiosas, este año parece que no tuvimos Semana Santa sino una Semana Grande de Fiestas en mitad de abril. Qué calor!!!!
También, este mismo año nos hermanos con el pueblo de Roccagloriosa de Italia por las similitudes tanto arquitectónicas como tradicionales.
Las fiestas fueron un poco accidentadas por todas las cogidas que ocurrieron con los astados, menos mal que no hubo que lamentar males mayores.
Septiembre llegó cargado de eventos entre ellos la III Concentración Motera «Follacos 2014», el día de la Virgen de la Bandera y la celebración del día de la Provincia de Zamora (dejaron la Iglesia que no parecía lo que era, pero estaba chula).
En resumen, todas las cosechas han sido buenas: muchísimas almendras, uvas y aceitunas para que no nos quejemos.
Y aunque no los haya nombrado hasta ahora, también, supimos celebrar Santa Cruz y San Albín (y que así sea por muchos años más).
A grandes rasgos este ha sido un año largo y difícil pero quien dijo que iba a ser fácil.
Para el 2015 sólo os deseo que en todo momento sigáis adelante y no perdáis la esperanza.
¡¡¡Feliz 2015!!!!